Radicalmente preventivos

En el año 2020 se jubilaron los osos amigables, los tigres rugientes, los elefantes y todo un zoológico de personajes infantiles que aparecían de manera familiar en los empaques de comida chatarra y bebidas azucaradas.

Con la implementación de la NOM-051, sobre etiquetado de alimentos y bebidas, que busca reducir el consumo de productos con exceso de calorías, azúcares, grasas y sodio, los productos con sellos de advertencia no pueden incluir personajes, dibujos animados, celebridades o mascotas dirigidos a niños y niñas.

Esa fue una de las medidas del primer piso de la 4T para promover hábitos de alimentación más saludables. Pero no sería la última. A partir del 29 de marzo de 2025 inició la prohibición de venta de productos ultraprocesados con sellos de advertencia y bebidas azucaradas en las escuelas de México.

Esa fue una de las medidas del segundo piso de la 4T para promover hábitos de alimentación más saludables. Pero no sería la única. La presidenta Claudia Sheinbaum planteó complementar la medida con una de las estrategias radicalmente más preventivas y de un alcance total: Vive Saludable, Vive Feliz.

 

Una estrategia que une a la SEP, al IMSS y a muchas otras instituciones con el objetivo de visitar todas y cada una de las 90 mil 832 escuelas primarias públicas del país y realizar cuatro intervenciones a los 12 millones de niñas y niños de primero a sexto de primaria: medir su peso y talla, su agudeza visual, la salud de sus dientes y una clase de promoción de la salud.

Luego de visitar con casi 800 brigadas un total de 27 mil 409 escuelas y haber valorado a 3 millones 940 mil estudiantes, estos son los primeros hallazgos:

Uno de cada dos niños de primaria tiene un peso fuera de rango y 18.3% de los evaluados tiene un problema de obesidad.

Los niños presentan más temas de peso y talla fuera de rango que las niñas, y conforme se avanza de grado escolar se desarrollan mayores índices de sobrepeso y obesidad.

El 55% de las niñas y niños tiene algún problema bucal o caries, que se vincula con el consumo de alimentos con alto contenido en azúcar. En la intervención se enseña la técnica correcta de cepillado y se aplica flúor.

Y el 35% está fuera de rango de agudeza visual.

Estos datos que pueden parecer desalentadores son una gran oportunidad, pues mientras más temprano hagamos la intervención y la referencia a una unidad médica, dental u óptica, vamos a poder evitar que se sigan desarrollando estos padecimientos. Al mismo tiempo permitirán diseñar mucho mejor las estrategias educativas y de salud pública.

La diferencia entre este esfuerzo y otros que se han llevado a cabo en el pasado reside en cuatro elementos:

Se trata de un esfuerzo nacional. Es un ejercicio territorial con registros nominales. Los mejores datos con los que contábamos antes eran de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut), pero no había un registro nominal niña por niña y niño por niño.

Se utiliza una misma plataforma para construir el Expediente Digital Escolar, que permitirá dar seguimiento al estado de salud y otorgar esa información a mamás, papás y tutores junto con recomendaciones sobre qué hacer (resultados.vidasaludable.sep.gob.mx).

Además, se vincula y se da seguimiento en una unidad de salud cercana adonde viven las niñas y los niños.

Ya lo dijo la Presidenta: la atención a la salud no es solamente cuando alguien se enferma, sino la prevención y la procuración de la salud, el verdadero derecho a una vida saludable, una vida feliz.

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